En medio de los desafíos diarios que enfrenta el transporte en Cuba, un pequeño acto de solidaridad y altruismo nos recuerda que todavía hay gente buena dispuesta a ayudar cuando menos lo esperamos.
Un chofer de un ómnibus de TRANSTUR se convirtió en el protagonista de un emotivo gesto que conmovió a sus pasajeros. Sin dudarlo, recogió a varios viajeros y los llevó hasta Santa Marta por tan solo 10 pesos, un precio razonable en tiempos tan complicados.
Eddy, nuestro héroe de la vida real, decidió no dejar a sus pasajeros en la explanada del antiguo aeropuerto, como hacen otros, sino que los llevó hasta la parada con destino a Cárdenas, asegurándose de que aquellos que se dirigían hacia allá tuvieran la oportunidad de tomar el camión que estaba cargando. Los pasajeros aplaudieron con gratitud y admiración a este hombre, agradeciendo su disposición para ayudar y su consideración hacia los demás.
En momentos donde las dificultades parecen abrumadoras, la solidaridad y la amabilidad nos fortalecen como sociedad y nos recuerdan que, juntos, podemos superar cualquier obstáculo que se presente en nuestro camino.